Soft Skills: qué son y por qué son tan imporantes trabajarlas

Soft Skills: qué son y por qué son tan imporantes trabajarlas

La psicología aplicada a las soft skills o también llamadas habilidades blandas, es una disciplina que se enfoca en el desarrollo y la mejora de las competencias de las personas. Estas habilidades, también conocidas como habilidades interpersonales o habilidades sociales, incluyen la capacidad de comunicación efectiva, la empatía, la resolución de conflictos, el liderazgo y la capacidad de trabajo en equipo. A menudo, estas habilidades se consideran menos tangibles que las habilidades técnicas, pero son igualmente importantes para el éxito en cualquier entorno laboral.

¿Qué son las soft skills o habilidades blandas?

El término «soft skills» o «habilidades blandas» fue acuñado en la década de 1970 para describir habilidades que no son específicas de una industria o trabajo en particular. Desde entonces, se ha reconocido ampliamente que las soft skills son esenciales para el desarrollo profesional en cualquier carrera o campo. Sin embargo, el desarrollo de estas habilidades puede ser difícil, ya que a menudo son más difíciles de medir y evaluar que las habilidades técnicas.

En este artículo, exploraremos cómo la psicología aplicada puede ayudar a las personas a desarrollar y mejorar sus soft skills o habilidades blandas, y cómo estas habilidades pueden ser evaluadas y evaluadas.

¿Cómo se desarrollan las soft skills?

En primer lugar, es importante entender cómo se desarrollan las habilidades blandas. A diferencia de las habilidades técnicas, que se pueden enseñar a través de la educación y la capacitación, las habilidades blandas son más difíciles de enseñar directamente. En cambio, se desarrollan a través de la experiencia y la interacción con otros.

Por ejemplo, la empatía se desarrolla al interactuar con personas de diferentes orígenes y perspectivas. La resolución de conflictos se desarrolla al tratar con situaciones conflictivas en el trabajo o en la vida personal. La capacidad de liderazgo se desarrolla al liderar equipos y proyectos.

A pesar de que estas habilidades no se pueden enseñar directamente, la psicología aplicada puede ayudar a las personas a mejorar y desarrollar sus soft skills a través de varias estrategias.

Desarrollo de soft skills a través de la psicología aplicada

1. Entrenamiento en habilidades sociales

El entrenamiento en habilidades sociales es un método común utilizado en la psicología aplicada para mejorar las habilidades blandas. El entrenamiento en habilidades sociales se enfoca en desarrollar habilidades de comunicación efectiva, empatía, resolución de conflictos y liderazgo, entre otras habilidades.

Este tipo de entrenamiento se puede realizar en un entorno de grupo o individualmente. Por lo general, comienza con la identificación de habilidades específicas que una persona desea desarrollar y luego se trabajan estas habilidades a través de juegos de rol y otros ejercicios prácticos.

2. Coaching

El coaching es otro método común utilizado en la psicología aplicada para desarrollar soft skills. El coaching se enfoca en trabajar con una persona individualmente para ayudarla a mejorar sus habilidades blandas.

El coach puede ayudar a una persona a identificar las áreas en las que necesita mejorar y trabajar con ella para desarrollar un plan para mejorar esas habilidades. El coaching también puede incluir ejercicios prácticos y retroalimentación sobre el desempeño.

3. Evaluación 360

La evaluación 360 es una herramienta que se utiliza en la psicología aplicada para evaluar las habilidades blandas. Esta herramienta involucra a varias personas, como colegas de trabajo, supervisores y subordinados, para evaluar las soft skills de una persona.

La evaluación 360 es una herramienta valiosa porque proporciona retroalimentación de múltiples perspectivas, lo que puede ayudar a una persona a identificar áreas en las que necesita mejorar y también áreas en las que ya es fuerte.

4. Terapia cognitivo-conductual

La terapia cognitivo-conductual (TCC) es una terapia psicológica que se enfoca en cambiar los patrones de pensamiento y comportamiento de una persona. Aunque a menudo se utiliza para tratar trastornos mentales, también puede ser útil para mejorar las habilidades blandas.

La TCC puede ayudar a las personas a identificar patrones de pensamiento y comportamiento negativos que pueden estar limitando su capacidad para interactuar efectivamente con otros. A través de la terapia, una persona puede aprender a cambiar estos patrones y mejorar sus habilidades blandas.

5. Programas de desarrollo de liderazgo

Los programas de desarrollo de liderazgo son una forma efectiva de desarrollar habilidades blandas, especialmente la capacidad de liderazgo. Estos programas se enfocan en desarrollar habilidades de liderazgo a través de capacitación, mentoría y práctica.

En estos programas, los participantes pueden aprender habilidades como comunicación efectiva, delegación, resolución de conflictos y motivación de equipos. También pueden trabajar en proyectos prácticos para aplicar estas habilidades en un entorno real.

Evaluación de las soft skills

La evaluación de habilidades blandas es un desafío porque estas habilidades son más subjetivas y difíciles de medir que las habilidades técnicas. Sin embargo, hay algunas formas en que las habilidades blandas pueden ser evaluadas.

1. Evaluaciones de personalidad

Las evaluaciones de personalidad pueden ser útiles para evaluar ciertas habilidades blandas, como la empatía y la capacidad de trabajo en equipo. Estas evaluaciones se basan en preguntas que evalúan la forma en que una persona piensa, siente y actúa en diferentes situaciones.

Es importante tener en cuenta que las evaluaciones de personalidad no son una evaluación completa de las soft skills de una persona y no deben ser la única forma de evaluación.

2. Ejercicios de simulación

Los ejercicios de simulación pueden ser una forma efectiva de evaluar las habilidades blandas en un entorno controlado. Por ejemplo, un ejercicio de simulación podría involucrar a una persona que trabaja en equipo para resolver un problema o lidiar con un conflicto.

Los ejercicios de simulación pueden proporcionar una evaluación más precisa de las soft skills de una persona que una evaluación de personalidad, ya que permiten una evaluación directa de las habilidades en acción.

3. Evaluaciones 360

Como se mencionó anteriormente, la evaluación 360 es una herramienta valiosa para evaluar las habilidades blandas de una persona. Al obtener retroalimentación de múltiples perspectivas, una evaluación 360 puede proporcionar una evaluación más completa y precisa de las soft skills de una persona.

Conclusión

Las soft skills son esenciales para desarrollarse positivamente en cualquier carrera profesional. Aunque estas habilidades son más difíciles de medir que las habilidades técnicas, existen varias formas en que se pueden desarrollar y evaluar.

El desarrollo de habilidades blandas comienza con la conciencia y la autoreflexión. Es importante que una persona sea consciente de sus fortalezas y debilidades en relación con las habilidades blandas para poder trabajar en ellas de manera efectiva.

Además, el desarrollo de las soft skills requiere práctica y experiencia. Participar en proyectos de equipo, asumir roles de liderazgo y trabajar en situaciones de resolución de conflictos pueden ayudar a una persona a desarrollar sus habilidades blandas.

La evaluación de las soft skills puede ser desafiante, pero hay algunas herramientas y técnicas disponibles para evaluar estas habilidades. Las evaluaciones de personalidad, los ejercicios de simulación y las evaluaciones 360 pueden proporcionar una evaluación más completa de las habilidades blandas de una persona.

En última instancia, el desarrollo y la evaluación de las soft skills es un proceso continuo. Las habilidades blandas son necesarias en todos los aspectos de la vida, no solo en el lugar de trabajo, y el trabajo en estas habilidades puede tener un impacto positivo en todas las áreas de la vida de una persona.

Por UPAD Psicología y Coaching

@upad_pc


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